Add parallel Print Page Options

Cuando Eliseo, hombre de Dios, se enteró de que el rey de Israel se había rasgado las vestiduras, le envió este mensaje: «¿Por qué estás tan molesto?[a] ¡Mándame a ese hombre, para que sepa que hay profeta en Israel!»

Así que Naamán, con sus caballos y sus carros, fue a la casa de Eliseo y se detuvo ante la puerta. 10 Entonces Eliseo envió un mensajero a que le dijera: «Ve y zambúllete siete veces en el río Jordán; así tu piel sanará, y quedarás limpio».

Read full chapter

Footnotes

  1. 5:8 estás tan molesto. Lit. te has rasgado la ropa.